A través de la publicación de la Resolución 460/2025, el Gobierno Nacional comunicó las nuevas condiciones sanitarias establecidas por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) para el ingreso de material reproductivo, carnes y productos cárnicos de animales susceptibles a la fiebre aftosa a zonas del país donde la infección se encuentra controlada mediante vacunación.
La medida, firmada por el presidente de SENASA, Pablo Cortese, fue publicada este viernes en el Boletín Oficial y ya entró en vigencia. De esta manera, representa un cambio parcial respecto a la normativa vigente desde hace más de dos décadas. Permitirá únicamente el traslado de cortes con huesos planos, como el asado y el costillar, “bajo estrictas condiciones sanitarias y de trazabilidad“.
La resolución afecta a productores, transportistas y comercializadores de productos de origen animal en todo el país, especialmente a quienes operan entre las distintas zonas sanitarias reconocidas por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA).
La decisión modifica una prohibición establecida en 2002, año en que la Patagonia fue declarada zona libre de fiebre aftosa sin vacunación. Desde entonces, el ingreso de carne con hueso desde el norte de la región, incluso desde provincias con vacunación regular y reconocimiento internacional por su estatus sanitario, permanecía vedado. El nuevo esquema, sin embargo, no implica un levantamiento general de la llamada “barrera sanitaria”, sino que constituye una excepción puntual “basada en criterios técnicos y sanitarios”.
Previamente, al conocerse la resolución del Senasa, distintas provincias patagónicas y entidades rurales de la región habían expresado su malestar, incluso contemplando la posibilidad de iniciar acciones legales.
El subsecretario de Producción de Tierra del Fuego, Emiliano Olmedo, manifestó que la provincia está abiertamente en contra y que la resolución los tomó por sorpresa. “Claramente estamos en contra de esta situación. Primero es inconsulta. Veníamos teniendo reuniones a través del Consejo Federal Agropecuario, donde expresábamos nuestras preocupaciones sobre medidas que tienden a flexibilizar y a poner en riesgo el status que hoy ostenta una parte importante del país y que costó mucho tiempo sostenerlo”, señaló.
En esa senda, recordó que en 2024 tuvieron múltiples reuniones con Nación en las que “si bien se entendían las cuestiones comerciales y la información técnica que está dentro de los considerandos, también hay otras cuestiones vinculadas a los reconocimientos de status, al riesgo que existe, que creemos que no fueron tenidas en cuenta y que vulneran la situación sanitaria de la región”.
“Este tipo de medidas pone en riesgo el trabajo de mucho tiempo. Tras más de 20 años, se toma esta determinación. Entendemos que no es la forma, hay ámbitos para discutirlo y consensuarlo y no se tuvieron en cuenta”, agregó Olmedo y recordó que Tierra del Fuego es la única jurisdicción del país en ser libre de brucelosis y tuberculosis, además de aftosa, sin vacunación.
“Todo ese esfuerzo es del SENASA, de la provincia y de los productores. Hoy, ante este tipo de medidas, carece de sentido; si mañana se cae, se pierde todo el trabajo y no tiene sentido. La propuesta patagónica y de los consejos es trabajar para mejorar el status de la Argentina y agregar cada vez más jurisdicciones que sean libres de aftosa sin vacunación, junto a otras enfermedades”, cerró.
El pasado 14 de abril, el gobernador Gustavo Melella se reunió con integrantes de la comisión directiva de la Asociación Rural de Tierra del Fuego, oportunidad en la que ratificó el compromiso de la provincia en continuar sosteniendo el rechazo absoluto a la flexibilización de la barrera sanitaria contra la aftosa; brucelosis y tuberculosis, ya que la provincia es libre sin vacunación desde hace mucho tiempo.
“La medida anunciada generó gran preocupación sobre el riesgo que esto representa para el estatus sanitario de la Patagonia, que ha sido desarrollado durante más de 20 años”, analizó el Gobernador y aseguró que “desde Tierra del Fuego vamos a plantear el impacto que tendría esa medida para nuestra provincia y solicitar que se suspenda definitivamente, con el compromiso y propuesta de trabajar por mejorar el estatus sanitario nacional”.
De igual modo, Melella insistió en que “se trabajó fuertemente en lograr un estatus sanitario diferencial, mejor, y esto habla de la calidad y la sanidad que hay en este territorio y es un plus que tiene la producción local, y una medida como la que se quiere tomar, sin justificativo; respaldo técnico y entendimiento de las consecuencias para la región patagónica, pondría en riesgo todo ese trabajo y compromiso que se ha mantenido a lo largo de décadas”.